La responsabilidad social hace un énfasis mayor en la práctica empresarial durante los últimos años. Para las personas el ser socialmente responsable significa reconocer la responsabilidad por el impacto de las decisiones de uno en el mundo.
Se espera que las empresas hagan del bienestar de la sociedad una prioridad cuando tomen decisiones, en lugar de centrarse exclusivamente en los márgenes de beneficio. Esto quiere decir en que no solamente se debe revisar cómo se gasta el dinero en las empresas, sino también en cómo lo ganan.
Algunas de las acciones de empresas socialmente responsables son: adoptar prácticas laborales justas, incorporación de estándares éticos en contratos, implementar prácticas ambientalmente sostenibles y emparejar las donaciones de los empleados a organizaciones sin fines de lucro.
Se sabe que todas las personas no pueden tener acciones socialmente responsables como lo hacen las empresas en general o los mismos dueños, pero existe la manera en la que se puede contribuir. Esto se puede manifestar de diferentes formas como:
. Trabajar como voluntario. Participar en actividades que ayuden a cambiar la forma de trabajo dentro de las empresas muestra una conciencia social que se compromete, no sólo por su bienestar, sino por el de los demás.
. Apoyar a las empresas socialmente responsables mediante un gasto informado.
. Ahorrar energía compartiendo el coche o apagando las luces innecesarias de la vivienda. Además de que es un ahorro para el bolsillo de la gente, esto ayuda a que no se tenga un consumo excesivo de energía eléctrica.
. Ponerse en contacto con sus líderes políticos a favor de la legislación que apoyan. Conocer a las personas que quieren hacer cambios a favor del trabajo y el medio ambiente, hace que este movimiento crezca y más gente conozca los beneficios que se pueden obtener teniendo ciertos cargos.
