Prueba a trabajar con distintos ángulos de cámaras. Se trata de una técnica de composición muy fácil de utilizar: basta con mover la cámara en distintas direcciones para marcar una gran diferencia.
A continuación, comparto cinco ángulos con los que casi siempre se obtienen grandes resultados.
Los cinco ángulos fotográficos esenciales
Técnicamente, hay infinidad de ángulos entre los que elegir, pero te recomiendo que aprendas sólo cinco. Aunque puedes improvisar ángulos por tu cuenta, se trata de opciones de eficacia probada cuyo funcionamiento está prácticamente garantizado.
Si puedes memorizar estos cinco ángulos, estarás preparado para enfrentarte a casi cualquier situación. Y si utilizas una variedad de ángulos con regularidad, la calidad de tus fotos subirá como la espuma.
Vista de pájaro
El ángulo de vista de pájaro es sencillo en teoría, pero suele ser difícil de conseguir.
Tienes que elevarte por encima del sujeto y luego disparar hacia abajo para conseguir el efecto.
Este ángulo fotográfico también es una forma estupenda de crear composiciones gráficas, ya que la perspectiva aérea a menudo aplana la escena, enfatizando las líneas, las formas y (especialmente) las sombras. Esta es una de las razones por las que la vista de pájaro es un método tan popular para las composiciones planas de alimentos y bodegones.
El ángulo alto
Un ángulo alto no es tan extremo como un ángulo a vista de pájaro. En su lugar, sólo tienes que identificar el sujeto y situarte a unos centímetros o unos pies por encima de él.
Afortunadamente, este ángulo suele ser fácil de conseguir sólo tienes que ponerte de pie o elevar la cámara por encima de la cabeza y el resultado es muy atractivo.
Cara a cara
El ángulo cara a cara se hace a la altura de los ojos del sujeto. (Si estás fotografiando una flor, es a la altura de la cabeza de la flor; si estás fotografiando un paisaje, suele ser a unos metros del suelo).
El efecto suele ser muy atractivo y ayuda a establecer una conexión entre el sujeto de la foto y la persona que la ve.
El ángulo bajo
Como cabría esperar, el ángulo bajo se consigue situándose por debajo del nivel de los ojos del sujeto y disparando hacia arriba. No es un ángulo muy popular por su dificultad (a menudo hay que ponerse en el suelo), pero los resultados suelen merecer la pena.
Vista de insecto
Este ángulo es ciertamente inusual; los espectadores rara vez experimentan un punto de vista así en la vida cotidiana, por lo que añade una perspectiva interesante y creativa a las imágenes.
Por desgracia, no es tan fácil conseguir una vista de insecto. A menudo es imposible disparar desde debajo de un sujeto (por ejemplo, los fotógrafos de paisajes rara vez pueden hacerlo), pero cuando se puede utilizar una vista de insecto, el efecto es bastante sorprendente.
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