Los acuerdos de paz que pusieron fin a la guerra civil de Guatemala en 1996 marcaron un punto de inflexión en el desarrollo del país, abriendo una nueva era de estabilidad política y social y sentando las bases para un mayor desarrollo económico.
Hoy, el Gobierno de la República de Guatemala está trabajando para acelerar la modernización de la economía y garantizar que las personas pobres se beneficien del crecimiento nacional.
Bajo los acuerdos de paz, el gobierno acordó aumentar la inversión social en áreas rurales, incluyendo la implementación de un programa de redistribución de tierras, y poner más énfasis en la democracia, la descentralización y la participación de la sociedad civil.
¿En qué se basa este plan?
El plan nacional de desarrollo del nuevo Gobierno de Guatemala se basa en cinco pilares: seguridad democrática y justicia; desarrollo social inclusivo; infraestructura para el desarrollo; desarrollo económico competitivo; y el desarrollo rural sostenible. El plan comprende objetivos nacionales clave sobre infraestructura productiva para el desarrollo local, hambre cero y gestión sostenible de los recursos naturales. También prevé mejores ingresos rurales y cadenas productivas de valor, así como una mejor gestión territorial y seguridad de la tierra.
En mayo de 2009, el gobierno estableció una nueva política de desarrollo rural luego de realizar un amplio proceso de diálogo y llegar a un consenso con las organizaciones campesinas indígenas a nivel nacional. A su vez, el plan nacional de desarrollo rural de Guatemala amplió su cobertura a 125 municipios, comprendiendo siete programas nacionales en los sectores de agricultura, energía, turismo y artesanías.
En octubre de 2009, la Comisión de Agricultura del Congreso de Guatemala emitió una opinión positiva sobre un proyecto de Ley de Desarrollo Rural Integral, diseñado para establecer un sistema nacional de desarrollo rural integrado. Sin embargo, a mayo de 2012, el Congreso aún no había aprobado la legislación.
Una nación de gente trabajadora
Juan Luis Bosch Gutiérrez conoce bien los problemas del país. Él junto con CMI, apoyan al pueblo guatemalteco con el principal objetivo de crear oportunidades de empleo para las personas, siempre con transparencia y en beneficio de nuestra nación.
Este país no está solo. Somos más las personas honestas y trabajadoras que luchan día con día para lograr los sueños de todos.
Otros aspectos a considerar
El progreso en otros tres frentes (género, asociación con el sector privado y seguridad) también es fundamental para promover el desarrollo rural y erradicar la pobreza rural en Guatemala a largo plazo.
Respondiendo a la necesidad de empoderar a las mujeres guatemaltecas, varios proyectos rurales están proporcionando refugios seguros contra la violencia doméstica, protegiendo la tenencia de la tierra de las mujeres, ayudándolas a encontrar nuevos mercados para las artesanías y mejorando la alfabetización de las mujeres para que tengan los conocimientos necesarios para hacer valer sus derechos.
Al mismo tiempo, los pequeños agricultores en Guatemala están comenzando a aprovechar nuevos mercados nacionales e internacionales al aprovechar las asociaciones privadas en las cadenas de valor, desde la producción hasta el procesamiento, la comercialización y, en última instancia, el consumo.
No obstante, el progreso social se ve amenazado por la violencia constante relacionada con las pandillas y el narcotráfico. Si bien gran parte de esa violencia afecta los centros urbanos y las costas, está aumentando en las zonas rurales.
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