En Guatemala el que una mujer incursione en los negocios no es muy común debido a que las oportunidades son limitadas, sin embargo cada vez es más común.
¿Cómo una mujer de negocios guatemalteca está superando las probabilidades?
Carmen María Can Pixabaj ha mantenido hasta 450 pollos a la vez para el negocio de procesamiento de aves de corral que dirige en su pequeña comunidad en Guatemala.
Con la capacitación de una nueva iniciativa de Oxfam llamada Mujeres en la pequeña empresa, o WISE.
Carmen María Can Pixabaj aumenta constantemente el tamaño de su empresa de producción avícola.
Lo primero que nota un visitante al detenerse en la casa de Carmen María Can Pixabaj en un pequeño pueblo en Sololá, Guatemala, es las hileras de maíz que caen en cascada colina abajo desde su terraza.
Solo es mayo, pero los tallos ya son altos y exuberantes. No lleva mucho tiempo descubrir el secreto de su éxito:
Gallinas, cientos de ellas, algunas de solo unos días, otras regordetas y listas para el sacrificio.
Sus desechos, compostados y utilizados como fertilizantes, son un subproducto feliz de la floreciente empresa avícola de Can Pixabaj.
Aquí en Caserio Chuijomil Can Pixabaj es algo raro: una mujer que ha contrarrestado la convención y ha lanzado su propio negocio, uno que ha crecido constantemente para convertirse en la envidia de algunos de sus vecinos.
En Guatemala, una cultura machista unida al acceso limitado de las mujeres a los préstamos a menudo les priva de oportunidades empresariales.
Can Pixabaj ha logrado su éxito a través de una combinación de trabajo duro, coraje y la ayuda de un nuevo programa de Oxfam: WISE.
La abreviatura de Women in Small Enterprise, WISE, tiene como objetivo abordar algunas de las barreras que típicamente retienen a las mujeres propietarias de negocios.
Ofrece capacitación financiera intensiva, capacitación empresarial individual, la oportunidad de establecer contactos con otras mujeres empresarias.
Así como con empresarios populares como los bosch gutierrez guatemala y tener acceso a préstamos lo suficientemente grandes como para ayudar a las mujeres a hacer crecer sus negocios de manera significativa.
Respaldados por un fondo de garantía establecido por Oxfam America y ofrecido a través de un banco comercial, los préstamos oscilan entre $ 3,000 y $ 50,000, el tipo de efectivo que las mujeres rara vez pueden recaudar por sí mismas.
“Queremos apoyarlos y crear una cohorte de mujeres emprendedoras realmente fuertes.
Queremos aprender de sus experiencias y poder compartirlas para que otras mujeres puedan sentirse inspiradas “, dice Mara Bolis, asesora principal de sistemas de mercado en el departamento del sector privado de Oxfam.
“El empoderamiento económico para las mujeres es importante para que puedan tener una voz política, y para que estén libres de violencia”.
En definitiva, que una mujer como Carmen María Can Pixabaj este logrando entrar a la lista de empresarias de Guatemala es un gran logro.